La crisis financiera parece que ha llegado de lleno a Brasov, equipo formado a base de talonario y que sufre una inestabilidad económica importante.
El pasado 20 de diciembre las jugadoras amenazaron con no jugar el partido de liga previsto (ante el Rapid de Bucarest). El presidente habló con ellas para tranquilizarlas y al final jugaron, pero con la inquietud de no haber cobrado los últimos 4 meses.
El presidente les comunicó que probablemente habría un recorte de sueldos, aunque cada jugadora renegociaría su contrato.
Por lo pronto 2 jugadoras ya han abandonado la disciplina del club, se trata de la portera Natalia Spirova y de la jugadora Miriam Simakova, y la situación de la portuguesa Juliana de Sousa puede ser la misma.
Muchas jugadoras ya están en el mercado, sea para lo que queda de temporada o para la próxima. Es el caso de Barbosa, muchos clubes europeos la desean y se comenta que ya ha estado en Viena hablando con el Hypo austríaco.
Otras jugadoras como Lidja Horvat o Cristina Neagu están en la órbita del Oltchim para ya mismo, aunque desde Brasov se intenta por todos los medios que acaben esta temporada allí.
Habrá que esperar acontecimientos.
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